Este año fuimos a Olmue a descansar. Para ello arrendamos una cabaña en los alrededores del pueblo. Contaba con todas las comodidades para descansar, tenía microondas, refrigerador, televisión (sin cable), living comedor bastante amplio, una pieza con dos camarotes y una pieza matrimonial.
La piscina era bien buena y con Miguelito y Gabriel la disfrutamos bastante.
Dejamos el auto en Limache y tomamos el metro hasta Valparaiso. Este metro es bastante más cómodo que el de Santiago. En realidad es un tren con aire acondicionado.
Paseamos un poco por Valparaiso con buen tiempo. Había un transatlántico en uno de los muelles.
Esta foto está linda. Como para fondo de pantalla.
Fuimos a ver una trilla, pero alcanzamos a ver como unos huasos elegantes realizaban los preparativos. Llegamos muy temprano, era domingo y la mayoría de los turistas se levantan tarde. Nosotros somos una excepción.
El escenario donde se realiza el Festival del Huaso de Olmue es en realidad más chico de lo que se ve en la tele. En la pantalla chica todo se agranda.
Realizamos una caminata por el Parque Nacional La Campana. Hay varios circuitos para realizar caminatas y es muy bonito. Nos cansamos bastante.
En la plaza de los caballos los niños aprovecharon de dar unos paseos en estos nobles animales.
Lo disfrutaron mucho. Eso si que había un olor caballuno en el ambiente.